Artículos para mejorar nuestra educación medioambiental
El medio ambiente también «cuenta»
Aunque, aparentemente, el medio ambiente o la ciencia, no sean un tema atractivo para protagonizar un cuento, un libro o una novela, no es así y las librerías están plagadas de sugerentes libros que cuentan divertidísimas historias, enseñan sobre medio ambiente e invitan a realizar numerosas actividades, además de disfrutar solo con la mera lectura.
Si te gusta leer, si te interesa lo que pasa en tu planeta y si quieres divertirte aprendiendo, escoge alguno de los siguientes libros y lee «ambientalmente».
https://www.anayainfantilyjuvenil.com/
En el artículo con este mismo título del apartado «Ocio educativo en familia» encontraréis, tú y tu familia, información detallada de las propuestas de lectura que se realizan: breve reseña, título, autor o autora, editorial, imagen de cubierta…
Canta por el medio ambiente
Un dicho popular dice que «la música amansa a las fieras», pero todos sabemos que la música sirve para mucho más: emociona, divierte, expresa, entretiene, inspira... y ¡enseña!
También con la música podemos aprender valores tan esenciales como el cuidado y respeto del entorno que nos rodea y del que formamos parte, el medio ambiente.
Aquí va un listado de canciones cuyas letras y sus respectivos mensajes os harán pasar un rato divertido conectado con la naturaleza, ¡que suene la música!
- Heal the World (Michael Jackson, 1991)
La traducción al español del título de esta canción y de una de sus frases más conocidas da una idea del mensaje que transmite esta canción: «Cura al mundo, haz un lugar mejor, por ti y por mí, y por toda la raza humana».
- Earth Song (Michael Jackson, 1995)
Esta canción es toda una crítica al deterioro medioambiental del planeta provocado por el ser humano, mensajes que aparecen en la canción como «What have we done to the world? » (¿Qué le hemos hecho al planeta?) lo evidencian.
- ¿Dónde jugarán los niños? (Maná, 1992)
La canción sirve para contar cómo los niños de antes jugaban y disfrutaban de una naturaleza sana, que se perderá debido al deterioro ambiental que la sociedad está provocando. Desde un punto de vista poético y melódico se mencionan aspectos como los incendios forestales («Se está quemando el mundo»), la contaminación atmosférica («El cielo ya se ha roto») y la contaminación hídrica provocada por los vertidos industriales («La mar vomita ríos de aceite sin cesar»).
- Colores en el viento (Vanessa Williams,1995)
Esta canción, incluida en la banda sonora de la película Pocahontas, puede encontrarse interpretada por muchos cantantes y en diferentes idiomas. El mensaje que transmite llama a ver el mundo desde un punto de vista global y no solo como perteneciente al ser humano.
- Do the Evolution (Pearl Jam, 1991)
Esta canción de rock hace una crítica a la actuación del ser humano con la naturaleza; en ella se plantean reflexiones como la condición de superioridad con la que actúa el ser humano con respecto al planeta.
- La costa del silencio (Mago de Oz, 2003)
El título del álbum en el que se incluye esta canción, Gaia, da idea de la temática a la que esta banda ha dedicado muchas de sus obras. La canción, con cierto halo de esperanza, llama a la actuación para solucionar los problemas medioambientales y así salvar el planeta.
- Don’t go Near the Water (The Beach Boys, 1971)
Esta banda californiana que sugiere a verano, denunciaba en esta canción, entre otras problemáticas, la contaminación de las aguas que ya existía en la década de los setenta del siglo pasado y que, lamentablemente, se ha acrecentado.
- The 3 R’s (Jack Johnson, 2006)
La canción puede convertirse en un excelente recurso para dar a conocer los aspectos que conforman la famosa regla de las tres erres: reducir, reutilizar y reciclar.
- Entre salitre y sudor (Duncan Dhu, 1989)
A través de esta canción, el grupo español denunciaba la caza de ballenas que contribuyó a su desaparición de nuestras cercanas costas del Cantábrico.
- What I’ve Done (Linkin Park, 2007)
Este grupo de metal rock habla en esta canción de las atrocidades que se han realizado sobre el planeta; desde la retórica que caracteriza algunas letras de canciones se hace una feroz crítica a la actuación del ser humano.
- Hermana Tierra (Laura Pausini, 2008)
En esta canción se relacionan los ecosistemas más importantes del planeta, sus principales características y algunos de los beneficios que estos aportan. Algunos de sus mensajes son: «Hermana Tierra, qué paz me das con tu desierto y tu glaciar», «Ya sabes que tus bosques son mi vida al respirar».
- Mamá Tierra (Macaco, 2006)
Esta canción, utilizada para celebrar el Día Mundial de la Tierra del año 2007, recuerda el daño que los seres humanos hacemos a la Tierra y a nosotros mismos. El tema propone una interesante actividad que puede provocar la reflexión de las personas que escuchan la canción; es la siguiente: tratar a la Tierra como si fuera parte de nuestra familia, nuestra madre.
- What a Wonderful World (Louis Armstrong, 1961)
Para acabar este listado de canciones «ambientales» con optimismo y esperanza, una de las figuras más representativas de la música, Louis Armstrong nos recuerda la belleza de nuestro planeta y clama a la esperanza en el futuro bajo el simbolismo metafórico del llanto de los recién nacidos. Es un placer escucharla y llena de optimismo cualquier espacio en el que se escuche.
Cuida el medio ambiente… también en casa
Seguramente vuestro colegio o instituto está repleto de carteles, eslóganes o normas medioambientales. Usa la papelera, ahorra agua, piensa antes de imprimir o fotocopiar… son mensajes que forman parte del interiorismo de vuestro centro escolar.
Estas normas y consejos contribuyen a mejorar la salud de nuestro planeta, pero no son solo aplicables en el entorno escolar, también en los hogares pueden tomarse medidas para cuidar el medio ambiente, y tú puedes ser el protagonista de ellas, es decir, tú puedes ser el responsable de incorporarlas en la dinámica de tu familia y de llevarlas a cabo.
Tú, aunque aún seas menor de edad, puedes colaborar en tareas cotidianas que ayudan a cuidar el planeta. Además, como muchas veces serán contenidos que has abordado en clase y que tu familia desconoce, puedes convertirte en «educador ambiental familiar». ¿Te apetece llevar a cabo este rol? ¿Qué puedes hacer para ello? Anota algunas propuestas.
- Recicla. Encárgate del reciclado de alguno de los materiales que más utilizas, por ejemplo, el papel que destinas a tus trabajos y actividades escolares.
- Reduce. Acuérdate y recuerda a los miembros de tu familia algunas medidas para ahorrar agua, energía… Por ejemplo, cierra el grifo mientras te lavas los dientes; reduce, en la medida de lo posible, el tiempo de tus duchas y baños; recomienda la compra de alimentos a granel y no envasados, el uso de bolsas reutilizables, la compra de productos en envases más grandes, el uso de ropas de abrigo para el invierno como las batas, etc.
- Reutiliza. Juega con tu creatividad y utiliza materiales que ya no se utilicen en tu casa para fabricar obras de arte, utensilios, herramientas..., por ejemplo, fabrica macetas con recipientes como los tetrabricks, las botellas de plástico…; utiliza papel escrito solo por una cara que haya en tu casa, como el de algunos recibos, para trabajar en sucio.
- Colabora con la decoración ambiental de tu casa. Es posible que en tu casa haya muchos elementos decorativos que has hecho tú o en los que has participado, pues sigue participando en esa decoración y aprovéchalo para sensibilizar ambientalmente a tu familia, por ejemplo: haz carteles que sirvan para llamar la atención de algunas de las normas ambientales que aplicáis en casa, cuida la estética cuando los realices, aplica tu pensamiento visual y dibuja iconos que sirvan para señalar los puntos donde acumuláis los diferentes tipos de residuos.
Un ser vivo en casa. Otra manera de aprender y sensibilizarse por el medio ambiente
Una manera de aprender sobre ciencias de la naturaleza, biología, ciencias de la tierra y medioambientales, ética, etc., además de otros aspectos competenciales, como la responsabilidad, el aprecio de la belleza de la naturaleza…, es cuidar y proteger a otro ser vivo.
Por esto, te proponemos tener en casa algunos de estos seres vivos:
- Una mascota. Antes de elegir una mascota tienes que hacer un riguroso análisis del coste y las responsabilidades que esta supone. Las posibilidades son innumerables:
un perro, un gato, un conejo, un pájaro… Desde aquí se recomienda la adopción antes que la compra de mascotas y la elección de especies que no repercutan negativamente en el medio ambiente, es decir, de especies que sean propias de estos medios y que estén adaptadas a vivir en estas latitudes. No dudes en proponérselo a tu familia, los beneficios que aportan las mascotas son infinitos: diversión, educación en valores, compañía, amor...
- Una planta. A veces, no es posible tener un animal, pero no por ello debe renunciarse a tener la compañía de un ser vivo, las plantas pueden ser un buen ejemplo; su coste es mucho menor y su cuidado es menos limitante. Por esto, para disfrutar de los seres vivos en nuestro entorno más cercano, proponemos tener una planta. Con ella podemos obtener muchísimos beneficios: trabajar aspectos propios de la autonomía, como la responsabilidad, intervenir en la estética de nuestro hogar, ya que las flores y las plantas son elementos de gran belleza, aprender con la experimentación cuáles son las necesidades de los seres vivos y cómo afectan las condiciones ambientales, como la sequía o la inundación, la contaminación, las condiciones climatológicas, etc.
- Peces de acuario. Al igual que sucedía con los animales como mascota, los acuarios y los organismos acuáticos que habitan en ellos suponen un coste económico y una serie de tareas que hay que analizar antes de lanzarse a tenerlos. Las aplicaciones educativas que ofrecen son enormes, al igual que los beneficios que aportan a las familias que los tienen: decorativos, trabajo de valores como el respeto de la naturaleza y la responsabilidad, experimentación científica…
Escucha la naturaleza
¿Cómo suena la naturaleza?
¿Te has hecho esta pregunta alguna vez? El sonido de la naturaleza es, quizás, uno de los aspectos más olvidados a la hora de estudiarla o disfrutarla.
Al pensar en los sonidos de la naturaleza, nuestra mente, posiblemente, nos lleve a cantos de aves, a agua circulando o rompiendo, como lo hacen las olas en el mar, a hojas movidas por el viento… Las posibilidades de sonidos son infinitas y sería imposible nombrarlas todas.
Pero, posiblemente, nunca hemos comprobado a qué suena. Por ello, te animamos a que dediques unos segundos a escuchar la naturaleza y que, con un dispositivo electrónico, grabes esos sonidos. Los descubrimientos y las sorpresas que te llevarás serán muy agradables y enriquecedoras. Además, cuando reproduzcas algunos de ellos, obtendrás grandes beneficios: aprenderás, te relajarás, te incitarán a investigar… ¡Pruébalo!
La escucha y la grabación de los sonidos puedes hacerlas en varios entornos, para que puedas compararlas y para que crees tu propia biblioteca sonora natural. Estos son los lugares que te proponemos
- Tu entorno más cercano. Tu casa, tu calle o tu centro escolar; todos forman parte del medio ambiente en el que vives, así que escucharlos y grabar cómo suenan, puede ser una experiencia muy interesante para ser consciente de lo que oyes cada día y que, por costumbre, has dejado de escuchar.
- El parque o el espacio verde más próximo. Aunque muchos de los parques o espacios verdes están dentro de las ciudades o de los pueblos donde vivimos, los seres vivos que habitan en ellos, sobre todo aves, son distintos a los que podemos encontrar en las calles; en ellos, seguro que puedes escuchar el bello canto de algún pájaro o el relajante sonido del agua de alguna fuente.
- El campo, el bosque o el monte. A pocos kilómetros del lugar en el que vivimos están esos espacios «sin civilizar» donde los sonidos de las máquinas y de las personas no son tan abundantes. Su escucha te sorprenderá, suena a eso que los poetas llaman «silencio», pero que en realidad no lo es, porque suena a cantos de pájaros, a hojas movidas por el viento, a agua de ríos o manantiales, a cereales y cultivos en movimiento…
Ejemplo de sonidos grabados en el campo:
Ejemplo de sonidos grabados en el mar y en un humedal:
Ejemplo de sonidos grabados en un entorno humanizado:
Profesiones y medio ambiente
Cada día, muchas personas desarrollan su actividad profesional en todo el mundo. Como ya sabes, cualquier actividad humana tiene unas consecuencias medioambientales. No obstante, las profesiones de algunas personas, por su naturaleza, tienen una relación muy directa con la salud medioambiental del planeta.
Algunas de estas personas han accedido a contarnos brevemente en qué consiste su trabajo y cómo contribuye a que disfrutemos de un planeta mejor.
Te las presentamos:
Antonio.
Agricultor.
Describe brevemente a qué te dedicas y qué relación tiene con el medio ambiente.
Soy agricultor, porque, aunque por edad ya estoy jubilado, de esta profesión no te retiras nunca: la tierra está ahí y, aunque ya no la trabajes como antes o no la siembres o no la explotes, sigue dando su «fruto», es así de generosa.
La relación que mi profesión tiene con el medio ambiente es directa y podría decirse que total: la naturaleza es mi lugar de trabajo, sus condiciones repercuten directamente en mi sueldo y apelo a ellas para seguir viviendo en el futuro; por esto, la preocupación por el medio ambiente para alguien que vive de la naturaleza, por y para ella es inmensa, si no nos preocupáramos por el estado del medio ambiente, no tendríamos presente ni futuro.
¿Cómo llegaste a esta actividad profesional?
Las circunstancias familiares y sociales de la época en la que empecé a trabajar me dirigieron a esta profesión: no quería emigrar a una gran ciudad, quería dedicarme a lo que sabía y ni siquiera me planteé si esto era lo mío o no, era lo que había y lo que tenía que hacer.
¿Necesitaste algunos conocimientos o estudios especiales para dedicarte a ella?
Los conocimientos y las habilidades me las enseñó mi entorno, mi padre principalmente, que también era agricultor. Por supuesto, los cambios tecnológicos y científicos que ha habido a lo largo de toda mi actividad profesional me han obligado a actualizarme, a formarme e, incluso, a reinventarme. Actualmente, el mundo agrícola ya no es lo que era y hay numerosas organizaciones que nos forman en el uso de abonos e insecticidas, por ejemplo, pero la experimentación diaria te hace ser un autodidacta y, a veces, aprendes y sabes de cosas que nunca imaginaste y que mucha gente ni sabe, de química, de genética, de gestión de aguas, de ingeniería, de mecánica….
¿Crees que tu trabajo contribuye a mejorar el medio ambiente? ¿Cómo?
¡Claro! Primero, producimos alimentos, somos los encargados de alimentar a la humanidad. Segundo, nuestra forma de producir repercute directamente en el medio ambiente, ya sea bien o mal, si abusamos de los nitratos y de los insecticidas, acabamos con los ecosistemas y con nuestro futuro. Y tercero, como dependemos directamente del medio ambiente, nuestra sensibilidad hacia él es máxima, aunque a veces, por cuestiones de subsistencia económica meramente, parezca lo contrario.
Por ejemplo, gracias a nuestro trabajo, nuestro esfuerzo y nuestra inversión, en nuestra zona se ahorra agua y energía y eso hace posible que tierras más abajo puedan sembrarse otros productos y que pueda haber gente que siga dedicándose a esto.
¿Te parece que la mayoría de las personas conoce tu actividad y reconoce la importancia que tiene? En caso negativo, indícanos qué sugieres para que sea conocida y reconocida socialmente la importancia de tu trabajo.
No. Los agricultores no somos reconocidos: somos el sector primario, ese que no requiere cualificación; la mayoría vivimos en el mundo rural, ese al que mucha gente atribuye el calificativo de analfabeto, y otra tanta gente considera que vivimos de las subvenciones, subidos en un carísimo tractor con calefacción y aire acondicionado… Poca gente sabe lo que se sufre al ver peligrar tu futuro y tu sueldo por una granizada, poca gente empatiza con nuestra actividad y reconoce que, gracias a nuestro trabajo, comen.
Supongo, que como todo, el reconocimiento ha de venir de la educación; si se enseña de dónde viene cada producto que nos llevamos a la boca y la importancia que estos tienen para su vida individual y para el mundo en general, por la relación directa que tiene su producción con el medio ambiente, este reconocimiento llegaría.
Tampoco ayuda mucho a nuestro reconocimiento los valores de la sociedad actual, no conozco a ningún agricultor, por muy brillante, honrado y honesto que demuestre ser, que sea considerado como referente; gustan más los que van con traje y corbata.
¿Recomendarías a los chicos y a las chicas que se dedicaran a tu profesión? ¿Qué les dirías?
Sí. Aunque les advertiría de que van a trabajar y sufrir mucho, supongo que como en otras profesiones, pero que la satisfacción cuando recoges tu cosecha, observas tus tierras y ves lo que has logrado con tus manos, es muy agradable. Y, por supuesto, les recomendaría que estudiaran para ser los mejores agricultores, y eso actualmente, implica ser un poco de todo: economista, biólogo, ingeniero, abogado…
¿Crees que existe un problema medioambiental en el planeta? ¿Por qué?
Sí, existe. No hay nada más que ver las noticias: contaminación en Madrid y restricciones de tráfico, lluvias torrenciales en Levante, nieve en la playa, incendios de neumáticos en un megavertedero, aguas contaminadas, sequía, sobreexplotación de acuíferos… Podría enumerar mil casos más, ¿no?
Desde tu punto de vista, ¿cuál sería la solución a los problemas medioambientales del planeta?
No soy ni ministro ni presidente de un gran país, pero con un poco de conciencia ambiental, un consumo responsable de los recursos y un poco más de solidaridad y menos ambición, los problemas medioambientales se disminuirían; solucionarlos, aunque parezca pesimista, es imposible, somos demasiados y este planeta da para lo que da.
Raquel
Ingeniera Técnica Forestal y Licenciada en Ciencias Ambientales.
Jefa de Sección del Servicio Agronómico Forestal de la Confederación Hidrográfica del Tajo del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.
Describe brevemente a qué te dedicas y qué relación tiene con el medio ambiente.
Desde nuestro Servicio llevamos a cabo diferentes proyectos relacionados con la prevención de incendios forestales en los montes, tratamientos silvícolas para la mejora de las masas forestales y repoblaciones forestales en aquellas zonas donde sea necesario para proteger el suelo frente a la erosión hídrica.
También realizamos numerosos proyectos relacionados con la mejora del uso público, habilitando sendas, acondicionando áreas recreativas, plantando diferentes especies autóctonas para aumentar la biodiversidad, etc.
Otra de nuestras tareas es la educación ambiental, llevamos a cabo un programa de educación ambiental en la Cuenca Hidrográfica del río Tajo, destinado a todos los ciclos de la educación, tanto primaria como secundaria, así como a educación especial. En dicho programa se incide especialmente sobre el agua y los bosques.
¿Cómo llegaste a esta actividad profesional?
Conocí esta profesión de casualidad, un poco antes de tener que elegir carrera universitaria, realmente no fue mi primera opción, pero luego me alegré enormemente de que no me llegara la nota para hacer Ingeniería Industrial, ya que así entre en Forestales.
¿Necesitaste algunos conocimientos o estudios especiales para dedicarte a ella?
Para el trabajo que desempeño actualmente es necesario estar en posesión del Grado en Ingeniería Forestal, además hay que aprobar una oposición para el Cuerpo de Ingenieros Técnicos Forestales del Ministerio.
¿Crees que tu trabajo contribuye a mejorar el medio ambiente? ¿Cómo?
Sí, sin duda; los trabajos que llevamos a cabo se centran en la mejora de las masas forestales, ya sea protegiendo el suelo frente a la erosión, mejorando la biodiversidad en dichas masas con repoblaciones forestales.
También hemos llevado a cabo numerosas acciones en montes situados dentro de la cuenca hidrográfica del Tajo, con el fin de prevenir los incendios forestales, haciendo cortafuegos, áreas cortafuegos, podas, desbroces selectivos, etc. Además, hemos mejorado la red de pistas forestales de muchos de nuestros montes para que en caso de incendios forestales se pueda acceder a ellos e intentar su extinción.
No hay que olvidar la labor de sensibilización y educación ambiental que llevamos a cabo desde nuestro organismo para concienciar a la población sobre la importancia de los recursos hídricos y forestales.
¿Te parece que la mayoría de las personas conoce tu actividad y reconoce la importancia que tiene? En caso negativo, indícanos qué sugieres para que sea conocida y reconocida socialmente la importancia de tu trabajo.
Creo que cada vez es más conocida, aunque hay muchos aspectos de la profesión que son desconocidos para la mayoría de la población, porque realmente solo se suele hablar de nosotros en la época de peligro alto de incendios forestales.
Para que la profesión llegue a más público, sería necesario aumentar la información en los centros educativos, mediante charlas o jornadas donde se pudiera plasmar la realidad actual.
¿Recomendarías a los chicos y a las chicas que se dedicaran a tu profesión? ¿Qué les dirías?
Creo que si les gusta estar en contacto con el medio natural y hacer algo por él, esta es la mejor profesión. Te permite gestionar parte de nuestro patrimonio natural, cuidarlo y mejorarlo, ¡¡¡es todo un reto!!!
¿Crees que existe un problema medioambiental en el planeta? ¿Por qué?
Creo que existen varios problemas medioambientales muy graves en el planeta, la contaminación atmosférica, la contaminación de las aguas, la deforestación, la pérdida de biodiversidad, el cambio climático, etc., y no parece que se estén tomando muchas medidas al respecto.
Desde tu punto de vista, ¿cuál sería la solución a los problemas medioambientales del planeta?
Lo primero es asumir compromisos y sobre todo cumplirlos. Las diferentes cumbres que se han celebrado en los últimos años en el planeta sobre diferentes problemas ambientales han sentado bases y directrices y buenas intenciones, pero a la hora de la verdad no se cumplen en la medida que deberían.
Ingeniero de Proyectos Eólicos Marinos
Describe brevemente a qué te dedicas y qué relación tiene con el medio ambiente.
Mi trabajo consiste en la selección de emplazamiento, diseño y construcción de parques eólicos en el mar. Se trata de una actividad estrechamente relacionada con el medio ambiente por diferentes motivos: en primer lugar, porque se tratan de aprovechamiento de energías renovables y bastante limpias; en segundo lugar, porque los proyectos se llevan a cabo en el medio marino, que se caracteriza por su gran riqueza ambiental, sensibilidad a las acciones del ser humano, condiciones adversas de trabajo y, en general, por el limitado conocimiento que tenemos de él.
Por eso, este tipo de proyectos requiere una investigación continua del entorno marino en todas sus facetas, con el desarrollo continuo de nuevas tecnologías para mejorar el conocimiento del medio en el que tenemos que trabajar. Todo esto nos permite avanzar en nuestro principal objetivo: trabajar totalmente integrados en el medio marino con la máxima seguridad para las personas y el medio ambiente.
¿Cómo llegaste a esta actividad profesional?
Realmente llegué por casualidad. Siempre me han gustado las actividades relacionadas con la energía, el entorno natural y la ingeniería. Hace tiempo, cuando la energía eólica marina era un sector poco relevante, alguien me ofreció entrar para analizar las posibilidades y me resultó interesante porque tenía los ingredientes anteriores. Realmente en aquel momento no pensaba que el sector podría avanzar tanto.
¿Necesitaste algunos conocimientos o estudios especiales para dedicarte a ella?
Personalmente, aparte de mi carrera de ingeniería, he necesitado una formación específica en energía eólica marina, para la dirección y gestión de grandes equipos de trabajo… Pero la riqueza y complejidad de los proyectos que se desarrollan en el medio marino hace que se requieran los conocimientos de especialistas de múltiples disciplinas lo que los convierten en proyectos muy enriquecedores, abiertos a todo tipo de profesionales. Tengo la suerte de trabajar con especialistas en biología, oceanografía, legislación, diversas ramas de la ingeniería, física, comunicación, economía, marinería, medicina, etc.
Además, el carácter internacional del mar hace que trabajemos con personas de diferentes nacionalidades.
¿Crees que tu trabajo contribuye a mejorar el medio ambiente? ¿Cómo?
Creo que sí. La energía eólica marina es una de las tecnologías de generación de energía renovable y libre de emisiones con mayores posibilidades de desarrollo en los próximos años en Europa. Si mantiene la senda de reducción de costes que está consiguiendo, puede convertirse en una tecnología relevante para conseguir la descarbonización del modelo energético y acercarnos a los ambiciosos objetivos que nos hemos puesto para luchar contra el cambio climático.
¿Te parece que la mayoría de las personas conoce tu actividad y reconoce la importancia que tiene? En caso negativo, indícanos qué sugieres para que sea conocida y reconocida socialmente la importancia de tu trabajo.
Probablemente, el sector eólico marino no sea muy conocido todavía y especialmente en España. No creo que sea un problema de reconocimiento sino simplemente de que se conozca el valor que genera y de no perder una oportunidad para muchas empresas y profesionales.
¿Recomendarías a los chicos y a las chicas que se dedicaran a tu profesión? ¿Qué les dirías?
El sector eólico marino ofrece posibilidades a muchas profesiones, con un alto grado de desarrollo tecnológico y un ambiente de trabajo internacional. Por otro lado, requiere desplazamientos a lugares algo remotos y a veces en condiciones adversas. En cualquier caso, cada uno debe dedicarse a lo que le gusta en la medida de lo posible.
¿Crees que existe un problema medioambiental en el planeta? ¿Por qué?
Me resulta difícil valorarlo a escala global. Tenemos un planeta extremadamente rico, dinámico y capaz de adaptarse a distintas situaciones. Quizá estamos en un momento de desarrollo en el que la acción del ser humano puede alterar ciertas condiciones globales de forma significativa. Creo que el planeta sabrá adaptarse para volver a encontrar el equilibrio. Nuestro reto es que la evolución del planeta debida a nuestra acción suponga una mejora global y no un deterioro para todos los que lo habitamos. Parece que tenemos capacidad de influencia sobre ello y podemos y debemos actuar.
Desde tu punto de vista, ¿cuál sería la solución a los problemas medioambientales del planeta?
Me encantaría saberlo o que alguien lo supiera. Quizá falte todavía conocimiento y sensibilización sobre los problemas y visión amplia más allá de nuestro ámbito personal. En el momento en el que estamos, todos empezamos a depender de todos en el planeta y se requieren acciones a nivel global sobre ciertos problemas: cambio climático, alimentación, recursos hídricos, protección de espacios... A la vez, es esencial que cada uno actuemos a nuestra escala trabajando en la mejora de los aspectos ambientales de nuestras actividades cotidianas: transporte, gestión de residuos, eficiencia energética... Este ámbito es esencial si queremos contribuir a transformarnos en una sociedad más sostenible ambientalmente.
César.
Agente forestal del Cuerpo de Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid. Comarca IX-XVI Parque Regional del Río Guadarrama.
Describe brevemente a qué te dedicas y qué relación tiene con el medio ambiente.
Me encargo de la policía, custodia y vigilancia del medio natural de la Comunidad de Madrid para el cumplimiento de la normativa legal aplicable relativa a montes, fauna, flora, caza, pesca, incendios forestales, ecosistemas, aguas continentales, vías pecuarias, espacios naturales protegidos, geomorfología, paisaje, y al correcto uso de los recursos naturales y de todo aquello que afecte al medio ambiente natural.
Soy funcionario público, agente de la autoridad (Policía Medioambiental) y de la policía judicial genérica. Trabajamos en la prevención, detección, extinción e investigación de los incendios forestales. Auxiliamos en caso de accidentes y emergencias de protección civil y levantamos actas de inspección, denuncias y atestados. También realizamos educación ambiental en centros educativos.
¿Cómo llegaste a esta actividad profesional?
En mi caso es vocacional, ya que desde pequeño me encantaban el campo y los animales. Después estudié geografía en la universidad, además del Ciclo de Formación Profesional de Grado Superior (Gestión y Organización de los Recursos Naturales y Paisajísticos) que en buena parte te encamina a esta profesión.
¿Necesitaste algunos conocimientos o estudios especiales para dedicarte a ella?
Para el acceso a la profesión, hay que realizar una oposición de grupo C (con prueba física, examen tipo test y supuestos prácticos sobre unos 40 temas). Somos unos 230 agentes forestales en la Comunidad de Madrid y unos 6000 en toda España.
¿Crees que tu trabajo contribuye a mejorar el medio ambiente? ¿Cómo?
Sí. Orientamos a los ciudadanos en la utilización de buenas prácticas en el uso de los recursos y en el disfrute del medio ambiente. Detectamos y denunciamos actos y comportamientos irrespetuosos con el medio ambiente y apoyamos la gestión de los espacios y especies protegidas. No hay que olvidar la labor de sensibilización y educación ambiental que llevamos a cabo desde nuestro organismo para concienciar a la población sobre la importancia de los recursos como el agua y los bosques.
¿Te parece que la mayoría de las personas conoce tu actividad y reconoce la importancia que tiene? En caso negativo, indícanos qué sugieres para que sea conocida y reconocida socialmente la importancia de tu trabajo.
No. La mayoría de la población no conoce las tareas de esta profesión. Actualmente nos estamos dando a conocer cada vez más en las redes sociales y sería deseable que los centros educativos nos valorasen como una salida profesional de futuro.
¿Recomendarías a los chicos y a las chicas que se dedicaran a tu profesión? ¿Qué les dirías?
Sí, por supuesto. Si te gusta trabajar en contacto con la naturaleza y ayudar a su conservación, colaborando en la gestión y uso sostenible de los recursos, esta puede ser una profesión ideal para ti.
¿Crees que existe un problema medioambiental en el planeta? ¿Por qué?
Sí. El cambio climático ya afecta al desarrollo de muchas zonas y aparecen sequías, inundaciones y otros fenómenos climáticos extremos. Además, hay que considerar mucho más problemas, como la gestión de los residuos, la pérdida de biodiversidad, la contaminación, la deforestación, la pérdida de suelos, etc. El planeta está en crisis.
Desde tu punto de vista, ¿cuál sería la solución a los problemas medioambientales del planeta?
Todo pasa por las generaciones futuras. Que la educación en los centros escolares y en los hogares consiga crear mejores personas en cuanto a la relación con la naturaleza y que el ser humano pase de creerse el centro del universo, a aceptar que es una parte del sistema que tiene que trabajar por un desarrollo sostenible, es decir, por asegurar el desarrollo de toda la humanidad en un medio ambiente saludable, sin poner en peligro el uso y disfrute de los recursos a las generaciones venideras.
Una reflexión sobre el planeta Tierra desde el espacio
El planeta Tierra: una nave espacial
Observa esta imagen. Es el planeta Tierra, nuestro planeta. ¿Ves las fronteras de los países y de los mares?
Nuestro planeta es de todos. No hay fronteras y el aire circula libremente por él, así como el agua de los mares.
Viviendo en el planeta quizá esta realidad no sea tan evidente, pero para los astronautas de la Estación Espacial Internacional, que lo observan desde lejos, sí.
Samantha Cristoforetti, una de las astronautas que ha vivido en la Estación Espacial, ha declarado en una entrevista:
«La Tierra es como una nave espacial, nos transporta a todos nosotros, los seres humanos, que no podemos habitar en ningún otro sitio. Por esto es necesario que lo cuidemos. Sobre la Tierra no somos simples pasajeros, somos miembros de una tripulación, igual que los astronautas lo son en la Estación Espacial. Por lo tanto, deberíamos intentar no causar problemas a la nave espacial que nos aloja, y trabajar con ganas para causar un impacto positivo en nuestro planeta».
(Il fatto quotidiano, 12/12/2014).