Guía para familias
En esta sección os proponemos algunas sugerencias relacionadas con los retos, las propuestas y los artículos que figuran en las secciones dirigidas a vuestros hijos y a vuestras hijas. Os invitamos a consultarlas, ya que os pueden resultar de utilidad a la hora de jugar y de conversar en familia.
Instrumentos musicales con material reciclado
Prácticamente cualquier objeto que tengamos a nuestro alrededor puede producir sonido, un vaso golpeado por una cucharilla o dos tapas entrechocándose podrían ser verdaderos instrumentos para una orquesta. Por poneros un ejemplo, en 1950, Leroy Anderson compuso una pieza musical llamada La máquina de escribir, para cuya interpretación es necesaria una máquina de escribir, ya que los sonidos de las teclas, la campanilla y los mecanismos de la máquina son imprescindibles para la obra. Pero no ha sido el único en utilizar objetos, en principio, no musicales en sus composiciones; otro ejemplo fue Giuseppe Verdi, que utilizó un yunque en su ópera Il Trovatore.
En nuestra sección «Te interesa» proponemos la construcción de instrumentos con material reciclado. Con esta actividad, no solo conseguiréis acercar a los pequeños un poco al mundo de la música, sino que también les transmitiréis valores de reciclaje, concienciándoles sobre el aprovechamiento de los residuos y sobre la importancia de respetar y cuidar el medio ambiente. Lo mejor de todo es que se divertirán mucho, tanto fabricándolos como haciéndolos sonar.
Hay gran cantidad de grupos y músicos que utilizan materiales reciclados en la creación de su música. La Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura, en Paraguay, está integrada por niños y jóvenes que construyen sus instrumentos a partir de lo que encuentran en la basura. Los Blue Man Group consiguen hacer maravillas con tubos de PVC. Mayumana y Stomp son expertos en reciclar y transformar cubos de basura, cajas y otros objetos cotidianos en auténticos instrumentos de percusión. Y Peter Bastian parece tocar un oboe, usando simplemente una pajita. Estos son ejemplos que podéis seguir investigando vosotros mismos a través de Internet, para ver cómo conseguir nuevos sonidos e instrumentos.
Os animamos a que busquéis en Internet vídeos de los intérpretes mencionados así como sobre la construcción de instrumentos con material reciclado. Otra web interesante es la de lesluthiers.org; en su sección «Instrumentos» se pueden ver vídeos (hay que seleccionar un instrumento haciendo clic sobre él y abrir la pestaña Multimedia) de Les Luthiers explicando el funcionamiento y parte de la construcción de numerosos instrumentos informales que ellos mismos han creado.
Estimulación musical temprana
La música es un poderoso medio de comunicación que hace que las personas se comuniquen de forma no verbal, que se entiendan, se relacionen, compartan sentimientos y sensaciones.
¿Qué es la estimulación musical temprana?
La estimulación musical temprana consiste en proporcionar un contacto con la música a los niños y las niñas en las primeras etapas de su infancia, para aprovechar los enormes beneficios que esto aporta.
Se recomienda empezar con la estimulación musical desde los 4 meses, salvo en casos de bebés prematuros (en este caso suele ser aconsejable que un musicoterapeuta realice sesiones muy cortas pero continuas desde las primeras semanas, ya que se ha comprobado que esto mejora en los bebés los procesos de la alimentación y del sueño).
¿Para qué sirve?
Son muchos los beneficios de la estimulación musical temprana; tanto los fisiológicos como los psicológicos.
Para empezar, es importante saber que el oído es el primer sentido que se desarrolla y el primero que se deteriora desde el primer año de vida. Por eso, su estimulación es muy importante para mantener las capacidades auditivas con las que nacemos.
Por ejemplo, el trabajo con los instrumentos de viento, como las flautas, el didyeridú o el kazoo (mirlitón o pito de chirigota), favorecen el desarrollo del habla, ya que trabajan la respiración, el control del aire. En el caso del kazoo, también estimula la producción de sonidos vocales, ya que son necesarios para que suene el instrumento.
La estimulación musical ayuda a desarrollar las capacidades perceptivo-motrices, como la motricidad fina y gruesa, las habilidades visuales y espaciales, el equilibrio y la coordinación. Agarrar una baqueta y golpear un carillón puede ser todo un reto para los más pequeños, al igual que distinguir de dónde viene un sonido.
El contacto con la música desde edades muy tempranas ayuda a desarrollar capacidades cognitivas como la creatividad y expresión artística musical, lo que a su vez permite el despliegue de las capacidades de comunicación no verbal y la apertura de nuevos canales de comunicación.
También mejora la afectividad, la conducta, la autoestima y el autoconcepto que tienen los peques de sí mismos; ayudándoles a empatizar, compartir y expresar sus emociones.
Por último, a través de las distintas dinámicas musicales se favorece la descarga física y emocional, la respiración y la relajación, entre otras muchas cosas.
La música y el desarrollo emocional
A través de la estimulación musical, las familias pueden ayudar mucho a mejorar el desarrollo emocional de los niños y las niñas. Para conseguirlo, se pueden seguir los consejos que figuran a continuación:
- Fortalecer la comunicación y la empatía con el bebé o niño a través del ritmo, del acento de frases y palabras, mediante el tono de la voz y su intensidad y de los movimientos del cuerpo. Acompañar sus sonidos con una imitación de los mismos es una buena forma de comenzar.
Poner nombre a los sentimientos cuando los pequeños no son capaces de hacerlo por sí mismos, bien de forma verbal o a través de la expresión musical con instrumentos de pequeña percusión que les sirvan como válvula de escape.
- Estimular la expresión de las emociones, con melodías conocidas o nuevas que les ayuden a calmarse en estados de irritación o ansiedad.
- Poner límites claros, coherentes y adecuados al desarrollo de cada crío. El hecho de tocar alguna pieza musical en grupo implica actuar de un modo concreto y estructurado, tocando o dejando de tocar según unas pautas acordadas. Son límites que establece la propia dinámica musical.
- Ayudarles a salir de las rabietas y a entrar en calma mediante la elección de piezas musicales adecuadas para esos estados emocionales, escucharlas con ellos y trabajar la respiración.
- Utilizar un tono de voz adecuado al dirigirnos a los menores.
Jugando con música
A continuación, se proponen unas dinámicas musicales y recomendaciones para que juguéis con vuestros pequeños y pequeñas.
- Intentad dar libertad a los críos a la hora de proporcionarles los instrumentos. Nuestro instinto es ofrecer al pequeño un instrumento concreto, pero es mejor dejar que escoja. Si tocamos alguno de los instrumentos, esto suele motivar al pequeño a hacer lo mismo y, en el caso de bebés muy pequeños, sí podemos ponerles el sonajero en la mano. Para esta dinámica de elección de instrumentos, preparad un sitio cómodo y colocad los instrumentos musicales (adecuad el tamaño y el tipo de los instrumentos a la edad de los críos. Por ejemplo: a partir de los 4 meses podemos utilizar pequeñas maracas y sonajeros de poco peso y que produzcan sonido fácilmente; posteriormente podemos ir ofreciéndoles instrumentos que utilicen baquetas, como los carillones o el tambor. Os recordamos que los instrumentos con sonidos agudos y metálicos les gustan, así que unas campanas o un triángulo pueden ser unos grandes compañeros de juego).
- Dad tiempo a los peques para que experimenten, que busquen las distintas formas de tocar un instrumento y no solo la manera «correcta».
- Intentad que los materiales y texturas de los instrumentos sean variados para trabajar al mismo tiempo el tacto (telas, piel, madera, metal…).
- Cuando los menores empiecen a tocar o a producir sonidos vocales, imitadles e intentad llevar la misma velocidad, ritmo y volumen que ellos.
- Una manera sencilla de facilitar la descarga emocional es tocando un tambor. Tocad juntos lo más fuerte que el pequeño pueda, sin limitar el volumen.
- Utilizad canciones del mundo para trabajar la audición de distintas lenguas, melodías y ritmos. Esto facilitará el posterior aprendizaje de idiomas.
- Intentad disponed de instrumentos variados. Como no siempre se dispone de instrumentos «de verdad», intentad que, al menos, haya instrumentos caseros realizados con materiales reutilizados, o simplemente objetos que suenen.
La música y el trabajo con la respiración
El uso de instrumentos de viento facilita el desarrollo de la capacidad pulmonar y el control de la respiración. No obstante, antes de pasar a jugar con estos instrumentos, conviene hacer un trabajo previo para ejercitar la respiración. Las formas de hacer esto con los niños y las niñas dependen mucho de la edad. Las que se describen a continuación, por ejemplo, son unas pautas generales que pueden servir a partir de los dos años:
- Imitación. Uno de los procesos de aprendizaje más importantes en la primera infancia es la imitación, así que si los adultos que atienden a los críos realizan una buena respiración, pausada y, a ser posible, diafragmática, los pequeños la imitarán. Hay que tener en cuenta que para los menores será más fácil, ya que es la respiración que se lleva a cabo al nacer y que perdemos poco a poco. Respirar con toda nuestra capacidad pulmonar es algo que podemos mantener. Invitad a los niños y las niñas a que respiren más lentamente de lo habitual. Por ejemplo, se puede contar hasta tres para coger el aire y tres para soltar. Poco a poco se puede ir aumentando a cuatro, cinco segundos…
- Ser consciente de la respiración. Pedid a los pequeños que cierren los ojos para que sean conscientes de la sensación que produce el aire al salir y entrar de la nariz. Cerrar los ojos es algo que no suele gustar a los niños pequeños, pero si lo hacemos con ellos, nos imitarán.
- Algunos ejercicios sencillos. El juego de intentar mantener un globo en el aire con soplidos y el de intentar mantener un trozo de papel pegado a la pared únicamente con vuestro soplido, son dos fantásticos ejercicios que servirán para entrenar el control de la respiración y que facilitarán después el trabajo con los instrumentos de viento.
LA RELAJACIÓN
Una de las preocupaciones habituales de los padres es cómo conseguir que sus hijos se calmen y relajen. Cada persona es un mundo y hay que observar qué herramientas funcionan mejor con cada una. En la relación siguiente hay algunos consejos para conseguir la relajación que pueden ser útiles:
- El contexto es importante. Los ejercicios de relajación con niños deben llevarse a cabo en un sitio cómodo, tranquilo, con una luz tenue y con los menos estímulos posibles. Los sonidos de la naturaleza y del agua nos pueden ayudar a crear un buen ambiente sonoro.
- Nos preparamos. Antes de empezar cualquier relajación es importante tomar conciencia de nuestra respiración, así que pidamos a los niños que se fijen en ella y que intenten respirar más despacio. La persona que guíe el ejercicio será el primero en respirar lentamente.
- Algunas técnicas. Las relajaciones guiadas suelen funcionar muy bien cuando se presentan como un cuento. Desde elegir un color e ir transformándonos en ese color pasando por todas las partes de nuestro cuerpo, desde los pies a la cabeza (ir poco a poco enumerando las diferentes partes) hasta imaginar un día en la playa o en el bosque. Muchas veces es más fácil relajarse si primero nos tensamos. Podemos ir tensando y relajando todas las partes de nuestro cuerpo, desde los dedos de los pies hasta fruncir el ceño. Como anteriormente, habrá que ir enumerando las distintas partes del cuerpo y dedicando unos segundos a cada tensión y relajación.
- Vibraciones relajantes. Los cuencos tibetanos ayudan a que los bebés se acostumbren a las relajaciones desde bien pequeños, quedándose tumbados en calma, disfrutando de las vibraciones del cuenco tanto en la tripa como en la espalda.
Soluciones de los retos y acertijos
Las soluciones de los juegos interactivos se hayan en esos mismo juegos.
En cambio, vuestros hijos y vuestras hijas no disponen de las soluciones de algunos de los retos, acertijos y experimentos que figuran en dicha sección.
Aquí os las dejamos para que se las administréis en función de vuestro criterio. Es una buena idea que representéis esos acertijos de forma gráfica o que hagáis los experimentos propuestos.
Adivinanzas
- Clave de Sol
- Silencio
- Notas musicales
- El compás
- Instrumentos de cuerda frotada (violín, viola, violonchelo y contrabajo)
Chistes de música
En música, las escalas menores suelen tener la séptima nota alterada con un sostenido (#), convirtiéndose en la sensible de la tonalidad. De ahí que La vea alterada a Sol#, y este le diga que está sensible, ya que Sol# es la sensible en la tonalidad de La menor.
Enigmas musicales
Si os fijáis en la partitura encontraréis dos claves musicales desde el principio, la Clave de Do está en su posición correcta y la Clave de Fa está al revés. Así que la primera voz se leerá y tocará en Clave de Do y para la segunda voz habrá que darle la vuelta a la partitura y leer o tocar la melodía en Clave de Fa.